La Estrategia operativa para la Internacionalización

Hace algunos meses en éste mismo espacio reflexionábamos sobre El contexto para la internacionalización de Canarias. Queremos seguir profundizando en el desarrollo de la Estrategia, y en los avances que realiza el Gobierno para convertirla en una propuesta aplicable y viable para su implementación. Para convertirla en una Estrategia Operativa.

Tras una etapa de profunda contracción económica que arrancó en el año 2008, y con la parte fiscal del Régimen Económico y Fiscal aprobada, el Gobierno de Canarias con apoyo del Parlamento, ha impulsado la Estrategia Operativa de la Internacionalización de la Economía (2016-2020). 

En un nuevo escenario económico y social, Canarias requiere políticas que ayuden a implementar las tasas de crecimiento y de empleabilidad. La Estrategia operativa se concibe, pues, como un instrumento que integre TODAS las políticas y las estrategias que tengan relación con la internacionalización de la economía canaria. Recordemos que el documento de Acción Integral e Impulso de la Internacionalización, aprobado por el Parlamento de Canarias en el año 2013, recogía que se debía promover, impulsar y coordinar todas las acciones de todos los departamentos del Gobierno, y del sector público y privado. Se pretende evitar así solapamientos innecesarios y aprovechar al máximo los activos.

En la Estrategia Operativa se recogen los siguientes objetivos específicos:

a)       Aumentar y consolidar el volumen de exportaciones.

b)      Incrementar el número de empresas canarias que operen en el exterior.

c)       Mejorar el nivel de inversión extranjera.

d)      Capacitar a las empresas canarias para la internacionalización, especialmente las pymes.

Para cubrir esos objetivos lo primero que se demanda es realizar un diagnóstico estratégico, para poder determinar a continuación los principales ejes a desarrollar y formular los objetivos generales y específicos dentro de un Plan de Acción concreto.

Una economía en proceso de internacionalización requiere flexibilidad para generar y aprovechar las oportunidades de negocio. Sólo así se podrá contribuir a la diversificación sectorial como complemento al sector turístico, que sigue siendo en eje central de la economía canaria en la actualidad.

El Gobierno de Canarias, a través de un concurso abierto, ha decidido dar entrada a la iniciativa privada para diseñar, implementar y realizar el seguimiento de la Estrategia Operativa. Se ha designado una Unión Temporal de Empresas en la que convive el conocimiento de la economía internacional, de las singularidades económicas y fiscales de Canarias y de las potencialidades económicas derivadas de la situación geoestratégica. Avanzar por ese camino requiere  ahondar en el proceso de transformación digital, apostar por la innovación, fomentar el espíritu emprendedor y cualificar los recursos humanos.

El objetivo de los próximos meses lo centramos en el cómo hacerlo, cómo empezar a acometer las acciones concretas. El siguiente escalón será establecer los indicadores de medición y seguimientos de las acciones que se implementen.

El Archipiélago Canario tiene ante sí el reto de re-posicionarse como Marca y como Producto. Y eso exige estrategias nuevas y singulares. Una diferenciación real que permita potenciar y materializar las oportunidades concretas. Si las economías más exitosas tienen una alta tasa de internacionalización, Canarias está obligada a incrementar su peso exterior.  Hemos de conseguir aumentar y consolidar el volumen de exportaciones, el número de empresas exportadoras regulares y el número de empresas canarias que operen en el exterior. Al mismo tiempo que se persigue incrementar el volumen de inversión extranjera, de manera sostenida; así como los estudios específicos para empresas que muestren interés por asentarse en el Archipiélago. De esta manera se conseguiría generalizar los beneficios de la internacionalización, capacitando a las empresas y a la sociedad.

Canarias, como plataforma atlántica, como territorio para el desarrollo de los negocios, como nodo de logística, transporte y telecomunicaciones; como plataforma de ayuda humanitaria, como centro de servicios del Atlántico, como referencia para el conocimiento y como laboratorio natural afronta la Estrategia Operativa para la Internacionalización.

El trabajo que queda por hacer es mucho. Los plazos están marcados. Y estoy segura que no perderemos este racimo de oportunidades.