¿Por qué te has roto tan rápido? La Obsolescencia Programada
Muchos de nosotros hemos oído o incluso formulado preguntas como la que lleva por título este artículo: ¿por qué se ha roto tan pronto? ¿Por qué ya no lo hacen como antes? ¿Es que lo fabrican para que al término de la garantía se rompa? Pues tristemente, en muchos de los casos, la respuesta es si, si y si.
El objetivo principal de una empresa es captar nuevos clientes y para ello pone en marcha toda una industria de marketing para que el cliente vea que su empresa es la mejor y decida comprar uno de sus productos. Pero hay un baluarte mucho mayor en la empresa fabricante, y es obviamente, el cliente recurrente. Esto es, el comprador que compra repuestos, utiliza el servicio post-venta o incluso compra un nuevo artículo renovado al término de la vida útil del mismo.
Y es que todos hemos tenido una lavadora, un coche o un ordenador que funciona de maravilla los primeros años de vida y que inexplicablemente comienza a dar problemas justo cuando la garantía ha finalizado. Se veía robusto, de calidad y la experiencia del usuario ha sido positiva hasta esa fecha pero de repente, deja de funcionar. (Se utiliza mucho conductismo y la poca memoria para aprovechar estos argumentos) El caso es que el cliente, resignado decide o bien reparar el producto que ha comprado o bien comprarle a la marca una versión renovada. En el peor de los casos es posible que decida comprar el producto de otra marca, pero no importa, seguramente los compradores estén saltando de una firma a otra constantemente, lo que mueve el mercado, genera ingresos y mantiene viva a la empresa… Hazte una pregunta ¿es rentable tener una lavadora por 25 años? Obviamente para el fabricante, no.
La obsolescencia programada no es más que un concepto que hace que el producto que has comprado quede obsoleto a un tiempo, dejando de existir piezas de recambio, o creando ciertas piezas para que se rompan de forma programada al tiempo de uso. Incluso encontramos contadores de uso o de tiempo que inutilizan la pieza para que tengas que renovarla aún estando en uso. Todo un atentado para el comprador, sobre todo para el consumidor que, como en Canarias, depende de tiempos de respuesta de proveedores a la hora de conseguir recambios debido a la distancia.
Las pruebas de ingeniería estudian que los productos duren un tiempo determinado y no otro, existiendo un pequeño margen de error que se puede asumir dentro de la garantía, pero que normalmente ocurre fuera de la misma. Cuando la compañía decide que un producto ha llegado al fin de su vida útil, sencillamente deja de fabricar piezas de recambio o de brindar servicio técnico oficial.
Pero sin duda, a pesar de los dos tipos de obsolescencia descritos, el más terrible es la obsolescencia programada por deseo, que es precisamente que dejes de mostrar interés en lo que has comprado en muy poco tiempo (meses) de haberlo comprado. ¿Te suena el mercado de los móviles? Es sin duda el objetivo de las compañías: que dejes de lado un producto plenamente funcional por otro que acaban de sacar mucho más atractivo pues el cliente recurrente genera ingresos.En el caso de Canarias como target comercial, y debido a su sensibilidad económica, en muchos casos, plantea un reto importante a la hora de hacer que los productos que las compañías intentan rotar sea ya de por si un empeño complicado.
¿Qué podemos hacer para evitar la obsolescencia programada?
Pues hoy en día prácticamente ser un experto comprador. Pero aparte de eso, hay un par de elementos quizás te ayuden.
Lo primero es intentar buscar un fabricante que brinde una garantía ampliada, dentro del producto que estés comprando con rápido acceso a nuestro mercado local canario, y decidir la vida que quieres darle. Por ejemplo “quiero comprarme un ordenador que dure 5 años” y en ese tiempo buscar la garantía ampliada. Lo segundo es buscar productos que cumplan estándares y donde puedas conseguir piezas compatibles aunque sean de otros fabricantes. Un coche tecnológicamente avanzado con una electrónica a la ultima está muy bien… pero ¿es compatible con piezas genéricas? A veces un mínimo sacrificio hace que obtengamos más vida de nuestra compra. Lo tercero, ver la política que tiene la compañía sobre este término y su servicio postventa, algo que puede investigarse fácilmente por internet. Lo último, si compras un producto e intentas evitar el efecto obsolescente, debes encontrar un producto que sea completamente funcional para lo que necesites y entrar en esa mentalidad, sabiendo que en menos de seis meses te encandilará una nueva versión de lo mismo que has comprado.
Sobre el Autor
Santy Abreu
Entusiasta de la comunicación, Analista, Programador y Técnico Superior en Administración de Sistemas y Gestión, está especializado en la estrategia e implantación de soluciones tecnológicas en la empresa a nivel internacional al tiempo que ha coordinado numerosos proyectos en Internet. Actualmente ejerce como fundador de la plataforma Civicos Networking y es Responsable de Sistemas y Cuentas de Clientes en Itop Consulting especializado en proyectos de Cloud Computing, soluciones ERP/CRM, Business Intelligence, Gestión Documental, Soluciones de E-Commerce y Gestión de soluciones personalizadas para la empresa. Además produce el programa radiofónico "Hablemos de Tecnología" difundiendo las novedades en todos los sectores tecnológicos.
Colabora dentro de la temática de Innovación y Tecnología.