Cómo reducir en 2 semanas tu impuesto sobre la renta de 2018

Se acercan las fiestas navideñas y en estos últimos días del año parece que todo se acelera, que no hay tiempo para nada y que no vamos a terminar todo lo que tenemos previsto hacer. En estas fechas, en las que las protagonistas son las palabras “paz”, “felicidad”, “fiesta”, “familia”, “compras” y otras muchas relacionadas con esta temporada, no parece tener cabida la palabra “impuestos”.

De hecho, puede que este artículo sea una vuelta a la realidad cotidiana de épocas no navideñas, pero como es posible que durante el resto del año no hayamos hecho bien la tarea tributaria, y los días avanzan inexorablemente, solo nos quedan dos semanas para realizar las últimas acciones tendentes a reducir nuestra factura fiscal, por lo que vamos a hacer un breve repaso de las decisiones más importantes que, con trascendencia tributaria, podemos realizar.

Es muy importante señalar que estos consejos suponen una generalidad, aplicable a la mayoría de las declaraciones de IRPF que se presentan anualmente pero, dependiendo del tipo y las cuantías de los ingresos percibidos, puede que no supongan ahorro alguno, sobre todo en rentas bajas.

Amortización de hipoteca de vivienda habitual

Si cumple las condiciones para deducirse los pagos de la hipoteca por la compra de su vivienda habitual, adquirida antes de 2013, puede realizar una amortización extraordinaria de capital, hasta un máximo de 9.040 euros anuales por contribuyente, pudiendo deducir hasta el 15% de las cantidades invertidas,  (1.356 euros).

Aportaciones a planes pensiones

Las aportaciones a planes de pensiones reducen la base imponible, hasta un máximo de 8.000 euros anuales, pudiendo también aportar al sistema de previsión social del cónyuge hasta 2.500 euros.

Donaciones a fundaciones, ONG y entidades sin ánimo de lucro

Este año también se premia la fidelidad en las donaciones a ONG, entidades sin ánimo de lucro y fundaciones, pues deduce el 75% sobre los primeros 150 € aportados y el 30% sobre el exceso, que puede incrementarse al 35% si es el tercer año que se realiza el donativo a la misma entidad, siendo cada donación igual o superior al ejercicio anterior.

Adelanto de gastos a 2018

Es posible que tenga previsto realizar algunos gastos en un corto periodo de tiempo, que le convenga adelantar a este año, para aprovechar las deducciones autonómicas vigentes. Analícelas y estudie esta posibilidad: rehabilitación de inmuebles, donaciones a hijos para la adquisición o rehabilitación de inmuebles, donaciones con finalidad ecológica, obras por razón de discapacidad, conservación del patrimonio histórico de Canarias o rehabilitación energética de la vivienda, entre otras.

En caso de tener algún inmueble arrendado, adelante esas pequeñas reparaciones que estaban pendientes, y recuerde guardar todos los justificantes, podrá deducirlos este año.

En mayor medida, si cabe, en caso de ser profesional o empresario persona física, pues puede que el adelanto de gastos de enero a diciembre suponga una importante rebaja en su cuenta de resultados, con igual resultado en su declaración.

Mayores de 65 años

Los mayores de 65 años que vendan su vivienda habitual están exentos de tributación por el incremento patrimonial derivado de dicha venta por lo que, en el caso de estar próximo a cumplir dicha edad,  le conviene esperar para realizar la venta. Si no es su vivienda habitual y ya la ha vendido, puede dedicar hasta un máximo de 240.000 euros a una renta vitalicia en una entidad bancaria o aseguradora, evitando tributar por la plusvalía obtenida.

Ganancias de ventas realizadas

En el caso de haber realizado alguna venta en 2018 que le haya supuesto un incremento patrimonial por el que deba tributar en la próxima declaración,  compruebe si tiene que vender algún otro bien que sepa que le vaya a suponer pérdidas, por ejemplo, un paquete de acciones de las que quiera desprenderse,  pues las pérdidas compensan las ganancias obtenidas en el ejercicio.

Tal y como avanzaba en el inicio del artículo, no son fechas en las que apetezca detenerse en el mundano análisis de los impuestos,  pero no cabe duda que, adelantar esa decisión unas semanas, puede suponer un considerable ahorro en su factura fiscal.